Nos alojamos en este hotelito súper guay cerca de los castillos cátaros. La zona es tranquila y perfecta para desconectar. Visitamos el castillo de Peyrepertuse y el de Quéribus. ¡Qué vistas más flipantes! Además, el personal del hotel fue súper simpático y nos dieron todas las indicaciones para explorar la zona.

Lo único que echamos de menos fue que el hotel no tuviese una zona de ocio para jóvenes como nosotros. Nada de juegos o actividades para divertirnos después de visitar los castillos.

Nos han gustado mogollón sus habitaciones con instalaciones adecuadas. Tenía una ubicación sensacional, cerca de un buen restaurante. Encima el hotel estaba relativamente cerca del Castillo de Peyrepertuse.

No había servicio.

Un hotel muy limpio con una ubicación bonita y un personal muy amable. Habitaciones bellamente decoradas que contaban con vistas a la montaña y las facilidades adecuadas. Había un restaurante muy bueno con una comida deliciosa. Pasamos un tiempo agradable.

Title: Gran escapada con amigos

Nos alojamos en un lugar super tranquilo, lejos de todo el ajetreo de la ciudad. Las vistas desde el hotel eran preciosas y el pueblo era muy tranquilo. Además, descubrimos dos lugares increíbles: unas ruinas antiguas impresionantes y una cascada mágica. ¡Fue una aventura que nunca olvidaremos!

Lo único que nos faltó fue un poco más de diversión nocturna. Nos encantaría que el hotel organizara actividades para jóvenes fiesteros como nosotros.

El cuarto en el que me hospedé tenía un baño privado con una ducha. ¡Excelente para refrescarme después de una noche de fiesta! El televisor LCD y la conexión Wi-Fi gratuita me permitieron relajarme y mantenerme conectado. había artículos de tocador gratuitos y un secador de pelo, lo cual fue muy conveniente.

Lo único que no me gustó tanto fue que la habitación tenía una vista a la montaña. Aunque podría ser una atracción para algunos, prefiero tener vistas más animadas y vibrantes.

Llegamos agotados después de un largo día de viaje y la chica de recepción fue extremadamente servicial y amable. Nos ayudó a solucionar un problema con nuestro coche y nos encontró un taller para arreglarlo al día siguiente. Las vistas desde el hotel son increíbles, justo al pie del castillo. Las habitaciones son cómodas y tranquilas, y cenamos en el restaurante del hotel, el vieux moulin, que fue una experiencia fantástica con camareros atentos, buena comida y precios razonables. La ubicación del hotel es perfecta.

El edificio por fuera es muy bonito y el restaurante en frente muy bueno y agradable. Nuestra experiencia en Hostellerie Du Vieux Moulin fue aceptable, ya que está muy bien ubicado en la ruta de los castillos cátaros. Sin embargo, es más bien un hostal. Disfrutamos de la tranquilidad del pueblo en el que se encuentra, aunque puede ser un inconveniente si no quieres pasar mucho tiempo en el hotel. A pesar de ello, la zona es super tranquila.

No hay nada que no nos haya gustado 😊.

Siempre vuelvo aquí porque el personal me ayudó la primera vez cambiando mi dinero y dándome consejos. Este lugar tiene todo lo que necesito: aparcamiento fuera del hotel, restaurante, bebida de bienvenida, cafetería, TV de pantalla plana. Volveré para una escapada romántica.

Qué experiencia más divertida! Pasé una noche en este 'hostal', ubicado en medio de la nada. Conexión wifi deficiente, desayuno escaso y mobiliario anticuado. Pero al menos el pueblo era tranquilo. demasiado tranquilo.

Qué lujo tener una cortina de ducha en el baño! ¡Claro, quién necesita algo tan insalubre como una mampara de vidrio!

Ubicación cerca de un restaurante y de muchas otras atracciones. Además, está a solo 5 minutos caminando del Castillo de Peyrepertuse. 🏰

Buena ubicación en ruta castillos, bonito edificio, restaurante cercano, tranquilidad del pueblo.

No hay nada que no me haya gustado.

El edificio bonito

Buena ubicación cerca de castillos. Buen restaurante en frente.Tranquilidad del pueblo

Nada obvio.

La terraza en el restaurante del hotel, abierta de martes a domingo, ofrece menús a la carta. Recibí una sorpresa cuando llegué: la terraza era como un oasis en el desierto. Con unas vistas impresionantes a las montañas, me sentí como si estuviera en el paraíso. Disfruté de una deliciosa comida mientras contemplaba el paisaje y me relajaba con el sonido de la naturaleza. No podría haber imaginado un lugar más perfecto para disfrutar de una comida. Definitivamente, fue una experiencia única.

Artículos de aseo no incluidos.

Pasamos una noche en un hostal llamado Hostellerie Du Vieux Moulin en una excelente ubicación en la ruta de los castillos cátaros. El edificio por fuera es encantador y el restaurante en frente es muy bueno y agradable. Disfrutamos mucho de la tranquilidad del pueblo y estuvimos muy cerca de los castillos cátaros.

La tranquilidad del pueblo puede ser un inconveniente si no deseas pasar mucho tiempo en el hotel.

Pasamos una noche en este acogedor hostal mientras visitábamos los castillos cátaros. La ubicación es inmejorable, muy cerca de los castillos. El edificio por fuera es encantador y el restaurante en frente es excelente y muy agradable. Además, el pueblo es tranquilo, ideal para descansar.